En un parque nacional de Tasmania construyeron un hotel sin dañar el ecosistema
/ septiembre 10 - 2019
El complejo hotelero Freycinet Lodge, ubicado en uno de los parques nacionales más antiguos de Tasmania, encargó a la firma australiana Liminal Studio la creación de nueve cabañas para el alojamiento de turistas.
A diferencia de la arquitectura hotelera tradicional, que suele construir grandes edificaciones para maximizar el número de habitaciones, este proyecto aprovecha la poca cantidad de unidades requeridas para proponer una serie de pabellones integrados con el paisaje de la bahía Great Oyster.
Las rocas del lugar y el color de la vegetación se reinterpretan en una arquitectura cuya geometría y materialidad persigue las formas del territorio, por medio de un diseño que se funde y se mimetiza con su fondo geográfico.
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Dispuestos de manera lineal y enfrentados al agua, los pabellones fragmentan sus funciones para definir una zona social, un baño y una habitación. Las tres áreas están vinculadas con un deck que genera un espacio descubierto hacia el frente.
Esto, además de obligar a los huéspedes a una relación constante con el entorno, promueve una forma de habitar en la que para moverse de un ambiente a otro hay que estar en contacto con el exterior.
La ausencia de ángulos rectos y el uso de aristas curvas producen una geometría singular y una espacialidad fluida, mientras las grandes vidrieras de piso a techo traen el paisaje al espacio íntimo.
Hacia la bahía, cada pabellón está bordeado de una malla tensada que hace las veces de hamaca y evita el uso de pasamanos con el propósito de no interferir con la vista.
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El uso de madera carbonizada en fachadas confiere a los pabellones un aspecto neutro. Adentro, la madera, esta vez aplicada con su tono natural en paredes, pisos y cielos, produce una atmósfera monocromática y unitaria que orienta la mirada hacia el colorido exterior.
El cuerpo encuentra un pequeño habitáculo confortable, pero los ojos se fugan hacia afuera.
Las comodidades y servicios que usualmente tienen las habitaciones de un hotel se diseñaron de tal forma que no quedan a la vista. Ocultos en el mobiliario integrado a los muros, desaparecen para no contrastar con la condición agreste del proyecto.
Liminal Studio propone un tipo de alojamiento que se diseña de manera específica, acorde con el entorno que ocupa. Antes que ubicar un conjunto de construcciones tipificadas sobre un lugar, reconoce en este los insumos para la creación de una arquitectura que cuestiona las maneras estandarizadas de la hotelería y ofrece una vivencia espacial singular.