Remodelación: cinco proyectos que nacieron de la transformación
Revista AXXIS / noviembre 10 - 2023

Las remodelaciones de estos diferentes lugares son la clave precisa que convierte a cada proyecto en una total obra de arte. Sus arquitectos y diseñadores se encargaron de transformar cada espacio modificando su puesta inicial en una zona llena de vida, funcionalidad y comodidad para los dueños.
1. Inspirado en un concepto cosmopolita
Para el arquitecto Martín Mendoza, el interiorismo de este apartamento, de 350 metros cuadrados, tiene un componente especial: no solo lo diseñó para un amigo, sino que también participó en su búsqueda.

Coexistieron en el diseño tres determinantes: la presencia de una colección de arte contemporáneo colombiano que buscaba incorporarse a la cotidianidad, el deseo de habitar un hogar “adulto” y que, durante el proceso, el cliente contrajo matrimonio.

Ubicado en un séptimo piso, el frente del apartamento —donde se encuentra la zona social— tiene vista hacia las copas de los árboles de un parque en el norte de Bogotá, mientras que las habitaciones la tienen hacia los cerros orientales.

Uno de los aspectos que Mendoza más disfrutó en este proyecto fue que, además de conservar y modificar algunos muebles del propietario, como el sofá curvo tapizado en bouclé crudo, tuvo la oportunidad de diseñar y producir piezas propias, como las mesas de centro hechas en metal o el daybed David, una banca de estructura metálica —acero y latón— con asiento en tiras anchas de cuero entretejidas, hecha en colaboración entre la firma MM&CO y El Buen Ojo Editions.
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2. Una remodelación a la medida
Desde el diseño arquitectónico hasta el más mínimo detalle del interiorismo, la diseñadora colombiana Francisca Trujillo logró desarrollar con éxito un lenguaje que conecta el origen de la casa montañesa, ubicada en Santander, España, con las necesidades y el estilo cosmopolita de sus propietarios.

Después de demoler su interior por completo, Trujillo y el equipo de arquitectos regresaron a la propuesta inicial de dos plantas, pero modificaron en su totalidad el concepto preexistente. Este proceso comenzó como un juego de Tetris, debido a que en un espacio relativamente reducido —260 metros cuadrados— la distribución debía ser estratégica para albergar, en forma armónica y funcional, cuatro habitaciones, tres baños, cocina, comedor, sala y cuarto de ropas.

El movimiento dentro de la casa es sencillo y marcado por los espacios que, si bien están completamente incrustados en la montaña, se viven en forma contemporánea. Todo está integrado y modernizado para no perder la conexión con el mundo exterior, a pesar de ser un refugio campestre. Desde la cocina y sus apliques, hasta la iluminación y los acabados arquitectónicos, se escogieron con la intención de suavizar la transición de la ciudad al campo.
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3. Un diseño especial hecho para niños
Este jardín infantil, ubicado en Bogotá, se aleja del color y el exceso para plantear una arquitectura con proporciones idóneas para los niños, sin dejar de lado a los adultos. Estos lugares, cargados de estímulos sensoriales, tienen una condición lúdica que se traduce en una arquitectura que soporta una serie de objetos que se utilizan como juegos espaciales. Es una arquitectura-juguete.

La intervención de 470 metros cuadrados de área tuvo varios frentes. En primera instancia, fue necesario hacer una reforma estructural en el inmueble, de tal manera que se tengan ambientes con los tamaños adecuados y se garantice la seguridad de los niños en caso de un sismo.

Construida por la empresa Duque Arquitectura, liderada por el arquitecto Esteban Duque, la obra civil de este jardín infantil preparó el espacio para un trabajo de arquitectura interior en el que cada estancia y cada pieza de mobiliario se diseñaron desde la ergonomía de los niños —medidas de los lugares y objetos en función del cuerpo de las personas—.
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4. La arquitectura de Goethe-Institut
La reforma que hacen en el primer piso del Goethe-Institut, a pocos metros del parque de la 93, en Bogotá, se comporta como una vitrina habitable, donde el espacio abierto y cada pieza de mobiliario permiten muchas maneras de usarse y ocuparse.

Este proceso de diseño implicó un diálogo constante entre los arquitectos y el Goethe-Institut. “Al tratarse de una obra pospandemia, para nosotros era muy importante la idea de volver a encontrarse, así que muchas de las conversaciones giraron en torno a esto”, explica Natalia Carrero, arquitecta encargada del proyecto por parte de Yemail Arquitectura.

Al entrar, un mueble de recepción curvo recibe a los visitantes. En él, se conjugan técnicas constructivas y materiales como madera y canaletas de vidrio traslúcido. En uno de los costados aparece una biblioteca que contiene libros sobre la cultura alemana.

Esta obra se plantea como una colección de piezas sueltas, donde el espacio entre ellas es igual de relevante a lo que se construye. Su carácter polivalente está en las maneras atípicas e indeterminadas de emplearse, pero también en la mezcla de materiales: vidrio, plástico, madera y metal.
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5. Un diseño con todo lo esencial para su dueño
“El dueño es chef, por lo que era necesario generar una cocina lo suficientemente amplia para alojar numerosos utensilios, electrodomésticos e ingredientes”, comenta Carolina Upegui, arquitecta encargada de la remodelación de esta vivienda en Bogotá, ejecutada por Constructora Arqstudio.

La personalidad creativa de su dueño debía verse reflejada en la elección de su propia casa. De ahí que el proyecto haya sido el resultado de un intenso proceso de remodelación, en el que la pasión por la cocina y el arte, en su sentido más amplio, no solo está presente en cada detalle, sino que recorre cada centímetro del apartamento.

La paleta de colores y materiales es sobria: ante la presencia de numerosas piezas de arte y decoración, los acabados debían mantenerse neutros para no saturar el espacio de color o texturas —lo cual habría disminuido todavía más la cantidad de luz en el interior—. El piso y la carpintería son de madera natural y los muros blancos, como una especie de lienzo sobre el cual se apoyan libros, cuadros y objetos.
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Me encanta la decoración, disfruto su revista .