Así nació Las Hijas de Huitaca, una serie dedicada a las mujeres más representativas de las diferentes regiones rurales de Colombia y que se gestó como proyecto de grado como fotógrafo en Lasalle College.
Carlos Saavedra se adentró en diferentes zonas rurales de Colombia durante un año. Muchas fotografías análogas e instantáneas fueron tomadas en cada región. Por eso, regresó a cada lugar donde estuvo con una exposición que retrataba con igual intensidad y detalle, las mujeres líderes o las anónimas. “Fue una gran oportunidad para que las mujeres se vieran a sí mismas y para que sus comunidades las vieran con otros ojos”, afirma Saavedra.
La serie está actualmente en la LABLOOM y se exhibe en tres formatos:
18 impresiones con enmarcaciones de alta calidad en gran formato, diez en formato medio y las fotos instantáneas en una especie de collage, dispuestas en una mesa para el público
Algunas piezas de la serie fueron seleccionadas en 2011 por la prestigiosa Revista Wallpaper, participó en una exhibición anual en la Galería de GETTYIMAGES. La exposición se mostró por primera vez en La Cinemateca Distrital en marzo 8 de 2012 y desde entonces ha sido itinerante. Las Hijas de Huitaca han llegado al Banco Interamericano de Desarrollo en Washintong, al Palacio de la Inquisición en Cartagena y ahora inició su itinerancia en espacios académicos en La Labloom en donde se podrá apreciar hasta la tercera semana de marzo.
“Huitaca fue considerada una diosa para el pueblo muisca que habitó el altiplano cundiboyacense. En varios relatos es considerada como la esposa rebelde de Bochica, el organizador social. Representa la luna, el agua, la maternidad, pero también la fuerza independiente de la naturaleza, el poder germinal de la tierra, la alegría irreverente, los oscuros y fértiles misterios de la vida y el deseo que ocurren bajo el manto de la noche”.