Un conjunto residencial que se funde con la selva en Tulum
Revista AXXIS, vía v2com / agosto 6 - 2025

Hacienda Wabi es un complejo residencial inmerso en la selva, integrado en su entorno natural. Desarrollado por Namus, una promotora con sede en Tulum, y diseñado por RA!. El proyecto consta de una serie de escaleras, terrazas y volúmenes escalonados que, con el tiempo, se fusionan visualmente con el paisaje, dando forma a un edificio residencial. Su diseño se inspira en la estética de las ruinas para reinterpretar el paso del tiempo y evocar los antiguos asentamientos que ocuparon la región.

Organizado en torno a un patio central, el complejo distribuye el acceso a 15 apartamentos distribuidos en tres niveles. Este espacio interior se fragmenta en patios más pequeños y esquinas que conducen a senderos sinuosos, culminando en una zona semipública con piscina y espacios recreativos.

El diseño de la obra

La configuración escalonada de los volúmenes permite una iluminación natural uniforme y ventilación cruzada en cada unidad, mientras que las jardineras perimetrales cubren parcialmente las fachadas, reforzando la idea de una arquitectura que prioriza la vegetación.

Cada nivel ofrece características distintivas: las unidades de la planta baja incluyen jardines y piscinas privadas, las unidades del primer piso cuentan con terrazas y jacuzzis y las unidades del segundo piso tienen terrazas y jardines en la azotea con vistas hacia las copas de los árboles.

Por otro lado, la materialidad se basa en elementos locales. La base está construida con piedra regional, mientras que los muros están revestidos con Chukum, un revestimiento natural elaborado con procesos vegetales y arena que realza la luminosidad interior y reduce la huella de carbono del proyecto.

Se instalaron paneles solares en las azoteas para promover la eficiencia energética, y se fomentó el crecimiento de vegetación tanto en el patio central como en las jardineras. Los tonos neutros en muros y losas permiten que la selva circundante sea protagonista, integrando el edificio en el paisaje sin alterar su carácter natural.

Hacienda Wabi propone una forma de habitar la selva donde la arquitectura se mimetiza con su entorno a través de materiales locales, estrategias de diseño pasivo y una relación directa con la vegetación, priorizando las experiencias cotidianas y el respeto por el paisaje.