Madrid: un almacén abandonado transformado en coloridos apartamentos
Linka News / marzo 14 - 2025

En lo que ahora se puede considerar un barrio residencial de Madrid, España, un antiguo almacén de fontanería y materiales de construcción, sin uso durante años, se ha transformado en un espacio residencial vibrante y colorido. El proyecto, denominado Apartamentos Almacén, marca el renacimiento de este emblemático edificio, reflejando el cambio y la evolución del entorno urbano que lo rodea.

Hace unos años, este almacén formaba parte de una zona semiindustrial junto a una importante autopista, donde pequeñas fábricas, talleres y almacenes convivían con los trabajadores de estas empresas y muchas otras. Sin embargo, la ciudad decidió transformar la autopista en un corredor verde, cubriendo el asfalto con árboles, parques y amplias zonas verdes.

Este cambio convirtió el barrio obrero en un lugar atractivo donde nuevas familias querían asentarse. Con el tiempo, las fábricas y talleres se trasladaron a otros lugares, dejando grandes espacios vacíos como este almacén, que quedó completamente desalojado.

Sobre la arquitectura de los apartamentos

Ante la creciente demanda de vivienda en este revitalizado barrio junto al río Manzanares en Madrid, surgió la oportunidad de reinventar este almacén y transformarlo en un complejo de apartamentos modernos.

El estudio de arquitectura madrileño OOIIO Architecture, responsable del proyecto, ha reconvertido un espacio industrial gris en ocho apartamentos, de aproximadamente 40 metros cuadrados cada uno, con un trastero exclusivo para cada apartamento, ubicado en el sótano del edificio. Los residentes actuales son principalmente jóvenes, tanto parejas como solteros.

Sin embargo, esta no fue solo una transformación física, sino también una renovación de identidad. En esta obra los colores vibrantes reemplazaron el gris industrial, introduciendo una paleta de amarillos, azules, verdes y naranjas, respetando al mismo tiempo la historia del lugar. Las tuberías y estructuras originales del almacén, en lugar de eliminarse, se integraron cuidadosamente en el diseño y se pintaron de amarillo, recordando a los residentes que este espacio, antaño funcional y gris, tiene una historia que contar.


Los nuevos apartamentos ofrecen una opción de vivienda única y moderna, respetando la esencia del almacén original y presentando un diseño actualizado que prioriza la luz natural, la comodidad y el uso eficiente del espacio.

Las nuevas viviendas, equipadas con todo lo necesario para la vida contemporánea, se han construido con madera, ladrillo rojizo y cerámica vidriada para hacerlas acogedoras y modernas. Desde sus ventanas, los residentes disfrutan de vistas a los árboles y parques que rodean el barrio, un lujo que parecía inimaginable hace apenas unos años.