Cuatro ejemplos de buena arquitectura institucional en Colombia 

Conozca estos proyectos con un diseño pensado para integrar la comunidad con el entorno mediante una arquitectura que entabla relación con el contexto en el que se ubica.

Artículos destacados

Tres obras que revelan una arquitectura sensible a la identidad, los oficios y la memoria

Equilibrio, potencia y calma: Mazda CX-60 PHEV, la experiencia de conducir desde el diseño

Las relaciones que teje un proyecto arquitectónico con el lugar que ocupa —en términos funcionales, paisajísticos e incluso técnicos— son fundamentales para que exista un arraigo físico y social de la construcción con su contexto. Propósito que los arquitectos de estas obras han logrado con una arquitectura institucional a la medida.

1. El edificio CEFE de Fontanar del Río

En la capital del país, los Centros de Felicidad (CEFE) son espacios dotados de áreas para la recreación y el desarrollo cultural de las personas. Al haberse asignado mediante concursos de arquitectura, este programa permitió aprovechar las propuestas de múltiples arquitectos en torno a una reflexión sobre la vida pública. 

Crédito de la foto: Cortesía Cauce.

Para el CEFE de Fontanar del Río, en Bogotá, los ganadores del concurso fueron las firmas antioqueñas CauceEstudio Territorios y Mapas. En su propuesta, aprovecharon el emplazamiento del edificio junto a un parque deportivo y recreativo para plantear una obra que se comporta como una puerta de acceso al parque y que facilita establecer una relación entre este y la calle. 

Crédito de la foto: Cortesía Cauce.

El proyecto, que debía tener un carácter deportivo importante, se configura a partir de dos acciones claras. La primera es plegar el suelo de tal modo que se crea un basamento topográfico que vincula los usos del parque con la ciudad a través de su pendiente artificial. En el primer nivel, los arquitectos ubicaron las dependencias recreativas y culturales. 

Cuatro ejemplos de buena arquitectura institucional en Colombia 
Crédito de la foto: Cortesía Cauce.

Lea el artículo completo dando clic aquí.

2. El edificio de la U. del Quindío

La nueva sede de la Facultad de Ciencias Agroindustriales de la Universidad del Quindío remplaza una antigua construcción que se había adaptado como sede de la escuela, pero cuyas condiciones físicas no eran las más idóneas para el desarrollo de las actividades pedagógicas y productivas. 

Crédito de la foto: Yeferson Bernal.

uno de los lineamientos de la obra —llevada a cabo mediante una convocatoria privada— era que el edificio debía albergar espacios tanto de carácter académico como productivo, puesto que la facultad trabaja de la mano con varias empresas del sector agroindustrial en proyectos específicos. Así, se pone de relieve la importancia del vínculo entre los campos académico y laboral.  

Crédito de la foto: Yeferson Bernal.

Con esto en mente, los autores del proyecto, los arquitectos Julián Larrotta, Carlos Andrés Montaño, Juan Carlos Mejía y Juan Sebastián Quintana, diseñaron un edificio capaz de acoger múltiples actividades, y no solo aulas de clase. De hecho, realmente son tres cuerpos que se articulan entre sí y en conjunto, por medio de una plaza pública llamada Plaza del Sol.

Crédito de la foto: Yeferson Bernal.

Lea el artículo completo dando clic aquí.

3. Arquitectura del nuevo edificio del Colegio Los Nogales

El edificio está localizado en un punto estratégico en el interior del campus. “Es el centro de una tríada de conexiones que comprende el ingreso general del colegio, el acceso a la biblioteca y la llegada al parque del Asombro”, señala Daniel Bonilla, quien por intermedio de su estudio tab >| Taller de Arquitectura de Bogotá, estuvo encargado de liderar este diseño.

Crédito de la foto: Alejandro Arango (@alejoarango_pr).

Esta singular ubicación geográfica definió la forma que adquirió la planta del edificio: un triángulo compuesto a partir de tres casquetes, articulados en torno a un vacío central que conecta los tres hitos del colegio.

Crédito de la foto: Alejandro Arango (@alejoarango_pr).

Los espacios destinados a los más pequeños están en el primer nivel, por facilidad de uso y accesibilidad. La conexión con el segundo la establecen mediante una rampa escultural que flota en el vacío y le da un carácter lúdico a esta circulación. “La rampa guía el flujo desde el segundo piso hacia el parque del Asombro. Su objetivo, más que solucionar la accesibilidad al interior del edificio, es estimular el juego”, asegura.   

Crédito de la foto: Alejandro Arango (@alejoarango_pr).

Lea el artículo completo dando clic aquí.

4. El Colegio Lucila Rubio de Laverde

Situado en Engativá, sobre el borde occidental de Bogotá, se concibió como un sitio que protege, pero al mismo tiempo hila relaciones con su entorno inmediato para consolidarse como una pieza urbana dispuesta a la comunidad y al paisaje. 

Crédito de la foto: Llano Fotografía, cortesía aRE.

Luego de ganar el concurso público para su diseño, la firma bogotana aRE (Arquitectura en Estudio) y la compañía de arquitectura peruana Nómena desarrollaron una propuesta que recoge los valores arquitectónicos del claustro, pero los materializa con un perímetro poroso en vez de cerrado.

Crédito de la foto: Llano Fotografía, cortesía aRE.

El volumen de seis niveles alberga las aulas, desde donde se puede disfrutar de una vista panorámica sobre el río, gracias a una serie de ventanas horizontales corridas. La masa de este edificio se ve diluida a través de la fachada interior, revestida con lámina metálica perforada, que junto con vacíos y dobles alturas en su sección, crea un efecto de transparencia. Una escalera exterior comunica los seis pisos y se comporta como un mirador ascendente sobre el patio.

Crédito de la foto: Llano Fotografía, cortesía aRE.

Lea el artículo completo dando clic aquí.

Comparte este artículo
lateral-derecho1
Haz clic aquí
lateral-derecho2
Haz clic aquí
lateral-derecho3
Haz clic aquí
lateral-derecho4
Haz clic aquí
ads-codigo-fijo-pc
Haz clic aquí

Otros artículos

Terrazo y concreto rosa en un restaurante que redefine la calidez urbana

El diseño de este restaurante celebra la materialidad. Entre terrazos con incrustaciones de mármol y una barra de hormigón rosa, el interior ofrece un recorrido por la calidez, el contraste y la sutileza del diseño bien pensado.

El hormigón, el acero y el color negro dialogan con la luz en este apartamento

El apartamento, ubicado en Praga, República Checa, parte de estructuras de hormigón a la vista que atraviesan tres niveles, transformándolas en un eje estético y estructural que define todo el espacio interior.

Modernismo californiano y paisaje europeo en una casa en Berlín que trasciende el tiempo

Esta casa cuenta la historia de una obsesión convertida en realidad: la búsqueda de Lars Triesch por traer a Berlín, Alemania, la esencia del diseño californiano y rendir homenaje a uno de los arquitectos más influyentes del siglo XX.

Suscríbase a nuestro newsletter

Para recibir todo nuestro contenido

Nombres
Correo electrónico