“Cuando llegué al taller de Hechizoo quedé sorprendido con sus textiles. Me sentí como un niño en una tienda de dulces”, recuerda el diseñador francés Andy Petit sobre su primer encuentro en Bogotá con el arquitecto y diseñador textil colombiano Jorge Lizarazo. En ese momento, Petit y su esposa, una diseñadora colombiana, radicados en Francia, tenían en mente crear una línea de accesorios de lujo que tomara como fuente de inspiración la tradición de las artesanías colombianas.

Sin embargo, buscaban crear algo distinto, concebir elementos de los cuales las personas se enamoraran, objetos que no estuvieran amarrados a una tendencia, a un color de temporada, a una estrategia de marketing. “Queríamos ser totalmente libres, como los artistas. Diseñar, dar unos pasos atrás, ver qué no está funcionando y reajustar. En el mundo de las grandes casas de moda muchas veces no tienes el tiempo para hacerlo”, explica el francés, quien ha trabajado en firmas tan relevantes como Givenchy, Montblanc y Kenzo –donde conoció a su esposa–.

De la mano de Lizarazo descubrieron una nueva interpretación de los tejidos y textiles colombianos. Tras esa primera visita a su taller en Bogotá decidieron aliarse para recorrer este camino que busca lograr piezas exclusivas, elementos que cautiven a sus futuros dueños. “No queremos algo masivo. Creo que el mundo está carente de tener una referencia personal hacia los objetos que porta. Los accesorios tienen que contar una historia y la mayoría de lo que encuentras en el mercado simplemente no lo hace. Nuestra propuesta no solo tiene la tradición artesanal colombiana, sino la del cuero en Francia y la del saber hacer en Italia –donde sus productos son realizados–”, afirma Lizarazo.

El punto de partida de Mestizoo, como tienen planeado llamar a esta marca de accesorios de lujo, fueron dos carteras que tienen como base un elegante trabajo en cuero, recubiertas por los delicados textiles de Hechizoo. La primera, Dualista, emplea una malla metálica que permite percibir el objeto de diversas formas gracias a su minucioso tejido y, además, darle distintos usos al tener dos lugares de almacenamiento, uno en el interior del cuerpo de cuero y otro entre este y la malla; Gemelos, por su parte, utiliza un tejido tradicional en palma de iraca que le da una forma sinuosa, elegante y femenina.

Un punto interesante de estas dos primeras piezas de la firma es su nivel de personalización: “Tenemos la posibilidad de hacerlas a la medida del cliente y en el color que desee. Vamos a ser los artífices de pasar ese deseo que tiene en su mente a su clóset, a su casa”. La próxima edición de la feria ArtBo, que se realizará del 26 al 29 de octubre, será el escenario para el lanzamiento de la primera colección de Mestizoo, donde sus accesorios buscarán ser protagonistas al mezclar la marroquinería europea con lo mejor de los textiles colombianos. Una fusión entre el Viejo y el Nuevo Continente.

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