Dos hermanos han adoptado las actividades al aire libre como parte de su acelerada vida en la ciudad. Un nuevo edificio a orillas del Lago Brome, actuará como símbolo y herramienta para el cumplimiento de este compromiso – un edificio en el que compartir el tiempo con los amigos. Dividido por un atrio vertical que se abre al lago, la esencia del diseño es un suelo de hormigón con una chimenea en su centro que crea un lugar para mezclarse.

Mientras los hermanos disfrutan de las posibilidades y placeres que ofrece una sociedad de ocio de esquís, raquetas de nieve, cañas de pescar, barro, equipaje, bolsas de la compra… lo mundano se desvanece cuando entran en el edificio. Tocando el piano y la guitarra, compartiendo historias, comiendo juntos, jugando juegos de mesa, viendo películas, cuantos más, mejor, los participantes comparten el espacio y disfrutan de las vistas.

La tensión arraigada en el sitio proviene de la anchura de tamaño urbano que aprieta la casa entre un número de otras casas en sus lados y su vista infinita sobre la orilla del lago protegida por una pared natural creada por la colina llena de árboles en la parte posterior.

La Cabaña Negra situada cerca de una pequeña ciudad en los municipios del este, entre las clásicas casas del siglo XIX y más recientemente construidas en modestas casas de campo. Concebida como una casa arquetípica, el edificio tiene tres entradas, formando una logia en la entrada y en la parte trasera, y una terraza cubierta en el lateral.

Arquitectura

La cabaña está centrada alrededor de un atrio que se abre al exterior. El diseño se desarrolló alrededor de una chimenea situada al lado de una zona de triple altura que la hace visible desde cualquier lugar dentro de la cabaña, generando así un cañón de hospitalidad.

Situado en el centro de un suelo de losa de hormigón en la planta baja, divide el espacio abierto en áreas de varias calidades espaciales. A ambos lados del cañón, las paredes acristaladas ofrecen vistas al exterior. Atravesando el cañón en el segundo piso hay un puente que crea más espacio común. Cuatro dormitorios se abren al puente.

El revestimiento exterior está hecho de alerce tratado con dos métodos. Los tablones carbonizados se enfrentan directamente a los elementos y el aceite natural protege los tablones empotrados menos expuestos. Este juego de luces y sombras aumenta el aspecto singular de la casa.

Acerca del Atelier Schwimmer

El Atelier Schwimmer es una oficina de diseño dirigida por Felix Schwimmer. Resolvemos problemas del entorno construido de varias dimensiones incorporando preocupaciones estéticas que buscan mejorar la vida cotidiana. Colaboramos con urbanistas, arquitectos, ingenieros, diseñadores, artistas y clientes con la intención de innovar y aprender. Cada proyecto tiene un impacto positivo en la comunidad y el entorno construido.

Nuestro enfoque se basa en la experiencia en la restauración comercial, industrial, residencial y de edificios, así como en la arquitectura paisajística y las instalaciones temporales. Cada proyecto se basa en los requisitos específicos de nuestros clientes y la innovación surge a través del proceso de diseño. Nuestro método combina una sólida competencia técnica y de gestión para ofrecer un servicio rentable y personalizado.

El taller ha desarrollado una experiencia para proyectos residenciales en zonas urbanas y rurales, en particular en el contexto de las ciudades de la Isla de Montreal. A través de un proceso de diseño que procede de la colaboración continua entre el cliente, el municipio, el constructor y los diseñadores, nuestro equipo ha desarrollado una reputación de producir proyectos de calidad.