Ubicada en un sitio aislado y boscoso a unas 25 millas al norte de Seattle, una casa contemporánea del noroeste de los años 50 ha sido completamente renovada conservando el espíritu de la casa original. Con amplias ventanas nuevas y monitores de techo acristalados, la casa renovada parece ser un pabellón de vidrio en medio del bosque.

El plano de planta se ha reorganizado para crear un dormitorio principal y un baño principal amplios y llenos de luz, con cada espacio rodeado de vidrio y vistas al bosque. Los espacios principales de sala y comedor se han ampliado ligeramente, y se ha agregado un nuevo monitor de techo con ventanas altas para brindar luz natural suave a todo el espacio. La nueva cocina ampliada tiene mostradores de cuarzo y vidrio fundido, con ventanas continuas que se extienden directamente al nivel del mostrador. 

Se ha conservado el techo de cicuta existente con vigas de abeto a la vista en aproximadamente la mitad de la casa, y se han agregado nuevos techos de abeto al resto de la casa. El suelo de terrazo existente se ha vuelto a terminar, con nuevas áreas de terrazo añadidas en un color complementario.

De acuerdo con la simplicidad y claridad originales de la casa, se ha agregado una paleta de nuevos materiales para crear poderosas yuxtaposiciones de textura y color, permitiendo que cada material se beneficie de las superficies adyacentes contrastantes. La carcasa consiste principalmente en paneles de cerezo: algunos paneles son lisos mientras que otros se han fresado con un enrutador CNC (controlado numéricamente por computadora) para crear una textura que evoca la «madera tejida». Una pared decorativa de 30 pies de largo adyacente a las áreas de comedor y cocina se ha revestido completamente con paneles de acero desgastados. La carpintería suspendida en la pared de acero utiliza paneles de resina con pastos naturales o madera de cerezo texturizada, ambos materiales contrastados con los colores pardos del acero.

En consonancia con otros proyectos de FINNE, esta renovación ha perseguido la idea del “modernismo artesanal”, el enriquecimiento de una estética modernista con materiales y objetos muy personales y artesanales. Las fabricaciones personalizadas incluyeron el mostrador de la cocina de vidrio fundido, paneles de pared de acero, marcos de espejos de acero suspendidos, valenzas de cortinas de acero cortado con láser, barras de iluminación de acero personalizadas, artefactos de iluminación de vidrio soplado a mano (colgantes TROMS) y una serie de muebles personalizados. La pared de vidrio entre el dormitorio principal y el baño principal se ha transformado con el uso de un patrón dibujado a mano en vidrio grabado, siendo el patrón más denso en la parte inferior (para una sensación de privacidad) y cada vez más transparente en la parte superior.

Las prácticas de diseño sostenible fueron parte integral del proyecto desde el principio. La calefacción radiante bajo suelo de terrazo ha creado una fuente de calor uniforme con la máxima eficiencia energética. Las ventanas altas del triforio aportan luz natural a las profundidades de la casa y los operadores motorizados permiten la ventilación durante los meses de verano. En el proyecto se utilizaron muchos materiales ecológicos (como paneles de resina, mostradores de cuarzo, linóleo, pintura con bajo contenido de COV y productos de madera sostenibles). Pero, sobre todo, es el hecho de la renovación en sí lo que es inherentemente sostenible y captura toda la energía incorporada de la casa original de los años 50, a la que ahora se le ha dado una nueva vida. La intensa artesanía y los detalles de la renovación también hablan de un principio sostenible muy importante: ¡constrúyalo bien y durará muchos, muchos años!

El diseño sostenible no es simplemente crear una lista de lavandería de materiales ecológicos; más bien, está creando formas y construcciones de edificios duraderos con materiales apropiados de ciclo de vida largo y bajo consumo de energía.