La historia de esta casa familiar inicia con el propósito de buscar una propiedad con más espacio, un espacio moderno aislado y de un tamaño modesto dispuesto para alojar familia y amigos. Los dueños de esta propiedad, una pareja con una niña pequeña, tenían la necesidad de dejar la ciudad para alojarse en un lugar relacionado con la vida campestre que les permitiera gozar de un hogar para siempre.

Así que, la familia se puso en contacto con la firma Feldman Architecture, quienes se encargaron del diseño de la casa ubicada en Portola Valley, California (EE. UU.). Dentro del desarrollo del proyecto se vinculó FQ Designs, firma que ejecutó el diseño de interiores.

Siendo así, el propósito de los arquitectos, partiendo de las necesidades de los dueños, se centró en sumergir completamente a los visitantes en colinas verdes y onduladas mientras ofrecía una visión diferente de la Bahía de San Francisco hacia el norte. Para lograr la obra seleccionaron una parcela en South Bay, inclinada hacia el oeste de Coal Creek Preserve.

El diseño de la casa

La huella principal de la construcción de la casa se basó en diseñarla en forma de L, creando un lugar para los momentos al aire libre y enmarcando una amplia vista a los lugares interiores de la vivienda. Además, su diseño se centra en orientar cuidadosamente los espacios de la vida pública generando una sensación de privacidad para la familia. 

Dentro del diseño de la casa se ubicó una barra principal que se expande verticalmente en un espacio de cocina y comedor de doble altura mientras conecta visualmente el nivel principal con un loft de estudio y dormitorios en el piso de arriba. Los pozos de luz y las ventanas en la fachada se encargan de dar la bienvenida a la luz de la mañana y ofrecer la vista de la vegetación sin comprometer la privacidad.

Una planta con un techo verde se extiende perpendicularmente y permite mezclarse con el paisaje circundante y crear un espacio de usos múltiples al nivel de la piscina para jugar, hacer ejercicio o entretenerse. De este modo piscina infinita actúa como una transición donde el paisaje cuidado se funde con el paisaje de pradera nativo.

Las vistas hacia el norte se capturan desde la habitación principal. Era importante para los clientes que esta terraza en la azotea fuera de acceso público sin comprometer la privacidad de su dormitorio.

Materiales usados en la obra

La selección de los materiales, que se caracterizan por ser duraderos y de bajo mantenimiento, define esa apariencia que los arquitectos buscaban darle a la casa. Se usó un estuco resistente para revestir el segundo piso este permite destacar el ciprés de Monterey, que conecta elegantemente con el nivel principal.  

Los muros de estuco y ciprés se apilan geométricamente, mezclándose con el interior de la casa. La materialidad discreta, moderna y limpia establece el tono para darle vida y acoger esos momentos familiares.