Esta iniciativa inició hace 5 meses con la convocatoria abierta en Latinoamérica y Centroamérica denominada Recomiende una obra, para que cualquier ciudadano postulara aquellas construcciones que considerara «buenas prácticas de arquitectura», con espacios públicos capaces de crear comunidad y de promover la convivencia colectiva de los habitantes.
A raíz de la iniciativa, la Fundación Rogelio Salmona, organizadora del premio, recibió un total de 51 obras postuladas, que fueron construidas entre el primero de enero del año 2000 y el 31 de diciembre del 2008. Estas obras estaban ubicadas en la Región México, Centroamérica y el Caribe, la Región Andina, la Región Brasil y el Cono Sur. Posteriormente, el comité jurado del premio, conformado por los arquitectos Silvia Arango (Colombia-Región Andina), Fernando Diez (Argentina- Cono Sur), Ruth Verde Zein (Brasil) y la historiadora de arte Louise Noelle (México- Centroamérica y el Caribe), realizó la preselección de 22 obras.
Este jurado, junto al arquitecto japonés Hiroshi Naito eligió como proyecto único ganador al Projecto Viver (Brasil), construido por la firma de arquitectos FGMF, y, adicionalmente, entregó tres menciones honoríficas a las obras: Centro Cultural Palacio de la Moneda y Plaza de la Constitución (Santiago de Chile, Chile), por los arquitectos chilenos Undurraga Devés Arquitectos; el Campus Urbano de la Universidad Diego Portales (Santiago de Chile, Chile), por los arquitectos Mathias Klotz y Ricardo Abuauad, y, por último, al Conjunto Parque de los Deseos (Medellín, Colombia), por el arquitecto colombiano Juan Felipe Uribe de Bedout, por ser diseños generosos, perdurables e incluyentes con los espacios públicos.
De tal modo que el Projecto Viver (Brasil) recibió el pasado 21 de Agosto de 2014 este galardón por contar con un diseño generoso, perdurable e incluyente con los espacios públicos y colectivos. Y, adicionalmente, por promover el encuentro de los ciudadanos con el fin de contribuir en el desarrollo urbano basado en el respeto y el reconocimiento del papel fundamental que juega la arquitectura dentro del espacio urbano.
Las palabras del Comité Jurado al presentar su decisión final fueron las siguientes: «…es una obra de gran calidad arquitectónica que ha sabido despertar el respeto y sentido de apropiación por parte de sus usuarios. Insertado en un barrio de grandes diversidades sociales, sirve a la comunidad y a su entorno de manera digna. Atiende con precisión y calidad el programa de actividades a la vez que proporciona un acceso digno al barrio mejorando notablemente su entorno. Con un esquema compositivo sencillo y eficaz organiza, con mucha sensibilidad y bajo condiciones topográficas difíciles, espacios colectivos articulados a los espacios públicos existentes, adecuados a eventos y actividades variadas (deportivas, sociales, culturales y educativas). La cuidadosa selección de materiales nobles y ligeros y la permeabilidad de los volúmenes consiguen su integración física y simbólica con la comunidad, sin mimetismos ni concesiones».
Algunos de los finalistas de esta competencia fueron el Centro de las Artes de San Luis Potosí (San Luis Potosí, México), el Edificio Proyecto Vivir (São Paulo, Brasil), y el Museo de la Memoria (Santiago de Chile, Chile).
Finalmente, la Fundación Rogelio Salmona espera seguir realizando esta competencia cada dos años, con el fin de promover una arquitectura de espacios significativos, abiertos y colectivos, y de brindar homenaje a aquellas construcciones latinoamericanas que le permiten al continente y a la ciudadanía contar con el mejoramiento de la convivencia de la comunidad o ciudad en que está construida.
Fundación Rogelio Salmona
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