Sid Lee Architecture, la firma que realiza el proyecto, presenta el diseño interior de Hiatus, una obra nacida en colaboración con A5 Hospitality y artesanos locales, para Ivanhoé Cambridge, con el objetivo de dar nueva vida al distrito comercial de la ciudad a través de un sofisticado restaurante.

El ambicioso cambio de imagen contempla la transformación completa de los pisos 45 y 46 del icónico rascacielos. Con la introducción de Hiatus, el estudio de arquitectura mantiene su deseo de reinventar el centro de Montreal a través de la lente de la creatividad.

Un restaurante con estilo internacional

Hiatus honra y se basa en el legado de diseño de PVM (Place Ville Marie), que se remonta a principios de la década de 1960. En lugar de una mera fusión del pasado y el presente, el restaurante existe más allá del tiempo o las tendencias, ocupando un espacio de pura sofisticación. Para evocar este encuentro de historia y modernidad el estudio de arquitectura revisó el movimiento moderno de mediados de siglo con un buen ojo para el «ahora».

De esta forma, Sid Lee Architecture buscó la forma de actualizar las firmas de la época usando paneles de madera, superficies reflectantes y detalles metálicos tubulares mezclándolos con elementos contemporáneos, por ejemplo, divertidos acabados iridiscentes, estampados florales gráficos y mampostería colorida. 

Además de invocar la herencia de PVM, el proyecto también rinde homenaje a las señales de diseño originales del edificio: la más destacada, la cuadrícula infinita. 

Los pasillos en forma de cruz, que conectan los ascensores y la cocina con el comedor más amplio, añaden un dinamismo único al espacio, entremezclando los movimientos de los invitados y el personal. 

Además, los reflejos de la estructura reticular de PVM también aparecen en el falso techo del establecimiento, lo que confiere una cualidad expansiva al espacio, así como un aspecto gráfico que remite al estilo internacional.

El propósito de Hiatus

El lugar abarca los pisos 45 y 46 de la torre es establecimiento único que sirve como restaurante, bar, cafetería, así como una serie de espacios para reuniones con servicio de catering integrados en el campus empresarial de PVM. 

Este animado espacio, que lleva a trabajadores y visitantes a los pisos superiores de PVM, inspira nuevos rituales diarios y da nueva vida al corazón del distrito comercial de Montreal. El espacio ofrece vistas panorámicas de Montreal, desde el río hasta la montaña y más allá, incluidos destellos de algunos de los lugares más emblemáticos de la ciudad, como la cervecería Molson, Farine Five Roses y Habitat 67.

Para los visitantes, Hiatus ofrece una experiencia gastronómica llena de entusiasmo y para los trabajadores de PVM, es un lugar para ampliar su jornada laboral, donde pueden realizar reuniones con clientes o relajarse.

La experiencia en el lugar

Cuando los visitantes salen del ascensor principal hacia el pasillo de servicio del piso 43^, son recibidos por un opulento espejo de pared a pared. 

Los recortes circulares en la cortina con estampados vibrantes visten ingeniosamente esta gran superficie reflectante, ofreciendo a los huéspedes un momento de autorretrato mientras esperan que el segundo ascensor los lleve a Hiatus. 

Este espacio liminal también presenta la misma esencia de roble rojo que se muestra en los pisos superiores, brindando a los huéspedes una muestra de lo que les espera arriba.

La transformación del espacio

Para este proyecto Sid Lee Architecture transformó el piso 45 originalmente construido como una sala de máquinas, en una experiencia de «bar clandestino», haciendo uso del ingenio creativo para aprovechar los desafíos únicos del espacio, incluido un plano en forma de cruz, espacio de piso limitado y techos bajos, en un ambiente atractivo e íntimo. 

En este piso, los comensales disfrutan de las impresionantes vistas de Montreal a través de una mínima cinta de ventanas que se extiende 360 ​​grados alrededor del espacio.  Aquí, parteluces con espejos, banquetas tapizadas en cuero color celeste y lámparas de mesa personalizadas de Lambert & Fils, hacen un guiño a la herencia modernista del edificio, mientras que una fascinante alfombra floral, que recibe a los huéspedes cuando ingresan al establecimiento, brinda una nueva explosión de color y diseño.

El diseño del piso 46

Una escalera ennegrecida conduce a los huéspedes desde el piso 45 al 46 al tiempo que sirve como limpiador de paleta óptica entre los dos espacios. En comparación con la atmósfera tranquila y compacta del 45, el piso 46 sorprende a los huéspedes con techos abovedados y ventanas completas, que llenan el espacio con abundante luz solar durante el día y brillante luz de la ciudad durante la noche. 

Además, el ambiente se complementa con una variedad de accesorios de iluminación, diseñados a medida en colaboración con Lambert & Fils. Una serie de apliques de pared, algunos en acrílico y otros en aluminio pulido, emulan la textura de la fachada de PVM, mientras que las instalaciones de iluminación tubulares acabadas en acero galvanizado iridiscente flotan entre una maceta colgante que rodea todo el espacio. 

En todas partes, las mesas y sillas de roble rojo tapizadas en cuero negro, diseñadas con Atelier Vaste, se remontan a los orígenes del edificio en la década de 1960, mientras que los detalles contemporáneos, como las impresionantes mesas de mármol Mystic Brown y Rainforest Green, dirigen suavemente la narrativa del diseño hacia el momento actual. 

En el comedor, dos tercios de las paredes están acabadas con la misma esencia de madera que los muebles, mientras que su sección inferior está adornada con piedra caliza Pietra Royal flameada. Una cinta de superficie reflectante ahumada estratégicamente ubicada conecta estos dos materiales y brinda a los invitados sentados vislumbres de lo que se opone a su campo de visión. 

Salas de juntas en el lugar

El muro este del piso 46 alberga una serie de salas de reuniones con servicio de catering completo, operativas durante el horario comercial del edificio. 

Ofreciendo las mismas vistas espectaculares que el resto del establecimiento, estas salas de juntas brindan a los trabajadores y visitantes de PVM un espacio elevado y emocionante para reunirse con clientes o colegas fuera del entorno habitual de la oficina. 

Paredes de vidrio insonorizadas del piso al techo conectan estas habitaciones con el resto del restaurante, mientras que las cortinas de tweed Lelièvre de cuerpo entero se pueden correr para mayor privacidad.

El diseño biofílico de Hiatus

Hiatus ofrece vistas impresionantes, mientras que los elementos de diseño se unen para celebrar Montreal como una ciudad rodeada de naturaleza, asentada entre el río y la montaña. Las características de diseño biofílico del espacio enfatizan esta conexión análoga entre ciudad y naturaleza. 

Los dos bares del establecimiento también sirven para resaltar esta dualidad: el bar Crystallo Bianco de latón macizo y retroiluminado en el piso 46 ofrece una vista impresionante del río San Lorenzo hacia el sur, mientras que el bar orientado al norte en el piso 45 tiene una vista exquisita del Mont Royal, la pieza de resistencia de la ciudad .